lunes, 1 de septiembre de 2014

Salida Pablo Iglesias

Salida Pablo Iglesias

Por un angosto y lóbrego túnel inundado de miserias, protegiéndose del acecho voraz de múltiples alimañas, camina una heterogénea muchedumbre. Es una representación del ciudadano medio español: desahuciados del fruto de su esfuerzo de tantos años; jóvenes universitarios sin empleo; jubilados y ancianos estafados por las preferentes; parados de larga duración cuya experiencia ya no cuenta; mendicantes forzados, vagabundos, inmigrantes y otros marginados sin techo; parejas de jóvenes sin acceso a préstamos ni ayudas públicas; indignados de toda edad ante la injusticia de sus políticos; campesinos y ganaderos  obligados a abandonar sus explotaciones; futuras promesas pronto derrotados del arte, la literatura, la ciencia, el deporte; enfermos crónicos que ya no pueden costear su tratamiento; idealistas que una vez confiaron en una democracia convertida en una farsa de la corrupción, del amiguismo, de la evasión de capitales, del desvirtuamiento de principios éticos…

Los perros de presa del capitalismo y del sistema opresor les acosan sin  piedad, empujándolos a un callejón sin salida aparente. No obstante, a cada paso, la multitud iba creciendo de nuevas víctimas de todas las capas sociales, pobres miserables que un día tuvieron dignidad.

El aire se enrarece por momentos, las fuerzas del orden establecido luchan sin tregua frente a la masa desesperada por la defensa de los bienes de los afortunados, de los poderosos, de gobernantes sin escrúpulos…

Sin apenas esperanzas, al límite de su aguante, empezaron a vislumbrar que, de alguna manera, se iba abriendo un hueco al final de esa catacumba, por donde se colaban rayos de luz acompañados de voces amigas que les animaban a unirse a ellos. La muchedumbre aceleró el paso con decisión, la luz se agrandaba, cada vez más cálida, hasta llegar a abrirse una puerta que inundó la oscuridad.


Una voz que destacaba y lideraba la esperanza, alguien salido del pueblo, propugnaba una redistribución justa de la riqueza, aplicar la justicia a los depravados, reescribir una ley más justa acorde con los tiempos, terminar con la casta dominante de una vez por todas, la salida a tanta inmundicia y pesar acumulados. Había que actuar sin más tardanza, poco o nada que perder y un futuro por conquistar estaba en juego…



2 comentarios:

  1. Este hombre, Pablo Iglesias y su partido Podemos, le ha devuelto la ilusión a muchas personas que creían que la clase (la casta) política de este país ya no tenía remedio, Espero que algún día lleguen al gobierno, y pongan las cosas en su sitio. Nos lo merecemos, ya está bien de tanto bipartidismo y tanta corruptela que da asco y nos tiene empobrecidos.
    Un abrazo, amigo.

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  2. Tienes razón, Carmen, aunque para ello tenga que posicionarse en políticas algo extremas, visto que con apaños y mentiras continuadas de los que ya están nunca saldremos de esta situación. Creo que es importante la organización en todos los municipios con sus asambleas libres para ir delimitando prioridades y posibles soluciones, y no tanto que se cree una fe ciega en un líder. De momento que dé el impulso necesario a una nueva forma de participación en los problemas.

    Saludos

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