“Todos los regionalismos,
en el fondo egoístas, nacen de intereses o cuando más de accidentes
geográficos. Andalucía, único sector de España que podría juzgarse nacionalidad
por constituir unidad geográfica, geológica, botánica y antropológica; y por la
opulencia de sus producciones; la única poseedora de acentuada personalidad
patente en su propio carácter, en su condición étnica, en sus genuinas
costumbres; la única víctima de la centralización, con la cual coinciden su
decadencia y la de la patria así como el progreso de otras comarcas antes
tributarias suyas, es la sola región de España que repugna el regionalismo. No
falta explicación a tan inverosímil antinomia. Andalucía no es, no puede ser
regionalista, porque Andalucía es España”
“Somos tal vez los
andaluces los únicos, o al menos los que mejor podemos hablar sin despertar
recelos de regionalismo, porque a nadie envidiamos, ni somos egoístas, ni
fundamos en insensatas emulaciones, ni en africanos odios, la exaltación de la
personalidad…. Y es que Andalucía es la España por excelencia; que todo lo andaluz se
convierte en nacional y todo lo nacional es andaluz”
Mario Méndez Bejarano - Andalucía y Ultramar (1929)
“Hoy hay también, al lado
de una realidad andaluza, un ideal
andaluz, la idea de una Andalucía ideal; pero ésta no se pretende ofrecer
como una visión del presente, sino como un presentimiento del porvenir”
“Este vaso de elección,
que es Andalucía, sugiere la imagen,
tiene el suave contorno de una copa de champaña… Y es tradición artística que
el seno de la mujer; copa augusta y dulce,
fue el sagrado modelo del primer vaso… Andalucía es el seno fecundo de España.
Andalucía es un ideal. Por eso se ha podido hablar del ideal andaluz. Andalucía es una idealidad… Su alma es tan aérea,
que mejor que de un alma andaluza debemos hablar de un aura de Andalucía:
hálito de su alma y halo de si cielo… Andalucía es inmensa: es toda una
inmensidad. Pero no una inmensidad vacía de contenido, uniforme y simplicista.
Andalucía encierra un potencial de diferenciación, como difícilmente puede
encontrarse otro igual en pueblo alguno. En menos grados de latitud no cabe una
mayor diversidad, ni más suma de contrastes que los ofrecidos por esta región
en sus condiciones atmosféricas, en las producciones de su suelo y subsuelo, en
su fauna y en su flora, hasta el punto de poderse afirmar con exactitud que no
hay una, sino varias Andalucías. Así se puede hablarse de una Andalucía
levantina y de otra lusitana y de otra manchega. Y así como hay una Andalucía
campesina y otra ciudadana, así hay una Andalucía serrana y una Andalucía
costera, marinera, la
Andalucía de las playeras y de la mar bella”
José María Izquierdo - Divagando Por La ciudad de la gracia (1914)
“Tenemos el deber de crear
para Andalucía una vida mejor, y debemos hacerlo formando, sin artificios, el espíritu colectivo. Una política clara,
limpia y sin sabor es esta de crear el espíritu colectivo. Las
individualidades, o sea los egoísmos, deben ceder por el dominio de cada uno
sobre sí mismo para la vida de la relación con los demás. Unos y otros, por
amor a Andalucía, a España y a la
Humanidad , debéis procurar que dejen de ser una contradicción
perenne el cielo azul de nuestra región alegre y las almas torturadas de los
andaluces. El espíritu se gobierna por la economía de la paciencia. Hay que
reflexionar, callados, sobre estas cotizaciones de la moral, positivo valor
financiero de los pueblos que quieren salvarse”
José Andrés Vázquez - Epistolario Bético (1919)
“El federalismo es una
nueva receta emanada de un grupo de pensadores que concebían la nación no como
un todo orgánico, moralmente indivisible, sino como un compuesto, como un
conglomerado de distintas sociedades unidas entre sí por medio de pactos
hipotéticos. Y en esta nueva fórmula, se volvía a hacer caso omiso de lo que
representaba todo el amor regionalista, es decir, la unidad viviente que constituía
la “región”, suficiente por sí misma –como organismo moral dotado de vida
propia– para los fines de un solo Estado”
“Es preciso, pues,
concretar este ideal, no
fabricándolo, sino haciéndolo surgir del pueblo con sus vigores y hasta con sus
defectos. Es preciso, por tanto, trazar una norma que, originada por el
sentimiento colectivo del pueblo, sea explicitada por los pensadores lo más
clara y naturalmente posible para que el mismo pueblo vuelva a recogerla y
asimilársela. De este modo, los que fueron sentimientos innatos y confusamente
sentidos serían después ideas poderosas que desarrollarían toda la vitalidad
adormecida de la masa”
Isidro de las Cagigas - Apuntaciones para un estudio del regionalismo andaluz (1914)
“Libertad es autonomía en el discernimiento y en la manifestación de
hechos de aquella facultad. Igualdad
para enriquecer el ser o superarlo. El desarrollo de estos dos conceptos se
acelera por la paz y solidaridad libre entre los seres humanos… La instrucción
no alcanzará el fin educativo como arma de una formalista educación ciudadana o
colectiva; sino como instrumento de una íntima y primordial aspiración
religiosa, concretamente definida de Eternidad, esto es, como arma de la
finalidad última de vivir, y la interpretación económica de la historia es,
precisamente, la negación de esta finalidad… Necesitamos gobernantes que sean
maestros; Estado que sea escuela; política que sea arte de Educación. Crear
hombres justos, no burócratas que nos aniquilen la verdadera ley del espíritu…
El ideal andaluz ha de ser el que traduzca el ideal humano, concretado en una
fórmula que condense y resuma todo un credo de optimismo, concebido, sentido y
esperado con efusión. Ese ideal representará la meta del amor a la creación que
por la vida se realiza, del amor que consagra al hombre creador que, en las
avanzadas de ésta, lucha y se debate, dirigiéndola a su final destino, por
medio del culto al ritmo y del esfuerzo por realizar la armonía en suma, por
medio de la perfección y del progreso incesante y eficiente que es belleza y
poder”
Blas Infante - El Ideal Andaluz (1915-1921)
(Manuel Ruiz Lagos - Ensayistas del Mediodía)
No hay comentarios:
Publicar un comentario